Hipotecas: Guía completa antes y después de solicitar
Introducción
Este artículo te proporcionará toda la información clave sobre las hipotecas de manera simple y comprensible. Vamos a cubrir los diferentes tipos de hipotecas, consejos prácticos y trucos que te ayudarán a ahorrar dinero y a evitar sorpresas con los bancos.
¿Qué es una hipoteca?
Una hipoteca no es más que un préstamo que solicitas a un banco para financiar la compra de un inmueble, ya sea una casa, piso, apartamento, etc. A diferencia de otros préstamos, en una hipoteca, el inmueble adquirido se utiliza como garantía. Esto significa que, si no puedes pagar el préstamo, el banco puede quedarse con la propiedad.
Aunque normalmente esto no supone un problema, en situaciones excepcionales, como en la crisis inmobiliaria de 2008, los precios de los inmuebles cayeron, y algunos propietarios se encontraron en la situación de perder su vivienda y seguir debiendo dinero al banco.
Factores a tener en cuenta al solicitar una hipoteca
Antes de lanzarte a pedir una hipoteca, es fundamental prestar atención a cuatro factores clave:
- Cantidad del préstamo: Evalúa cuánto necesitas realmente pedir prestado.
- Tipo de hipoteca: Fija, variable o mixta.
- Tipo de interés: El coste del dinero que te presta el banco.
- Plazo de devolución: El tiempo durante el cual devolverás el préstamo.

Ejemplo práctico
Imagina que has encontrado la casa de tus sueños valorada en 200.000 euros. El siguiente paso es decidir cuánto dinero aportarás de tu bolsillo y cuánto pedirás al banco. Recuerda que, además del precio de la vivienda, tendrás que cubrir gastos adicionales como notario, impuestos, muebles, etc.
En España, lo mínimo que tendrás que aportar es un 10% del valor del inmueble, aunque lo más habitual es que debas poner al menos un 20%. Esto significa que, para una casa de 200.000 euros, deberás disponer de 40.000 euros.
Tipos de hipoteca
Existen tres tipos principales de hipotecas:
- Hipoteca a tipo fijo: El interés se mantiene constante durante toda la vida del préstamo. Esto te protege contra subidas en los tipos de interés, pero suele ser más costosa.
- Hipoteca a tipo variable: El interés está vinculado al Euribor, que varía con el tiempo, lo que significa que las cuotas mensuales pueden subir o bajar.
- Hipoteca mixta: Comienza con un interés fijo durante un periodo inicial y luego cambia a un interés variable vinculado al Euribor.
¿Cuál es la mejor opción?
La elección entre tipo fijo, variable o mixto depende de la situación económica. Si los tipos de interés están bajos, una hipoteca a tipo fijo puede ser la mejor opción, mientras que, si se espera que bajen, una hipoteca variable podría ser más ventajosa.
Negociación del tipo de interés
El tipo de interés que obtendrás depende de tu capacidad de negociación con el banco. Pregunta en varios bancos o utiliza comparadores de hipotecas online para encontrar la mejor oferta. Algunos bancos te ofrecerán descuentos si contratas productos adicionales como seguros o fondos de inversión.
El plazo del préstamo
En España, las hipotecas suelen seguir el modelo francés, lo que significa que al principio pagas más intereses que capital. A medida que avanza el tiempo, los intereses disminuyen y aumentas la devolución del capital prestado. Por eso, si en algún momento recibes un extra de dinero y decides amortizar tu hipoteca, es mejor hacerlo en los primeros años para ahorrar más en intereses.
¿Conviene amortizar la hipoteca?
Decidir si adelantar la devolución de la hipoteca depende de si puedes obtener una rentabilidad mayor invirtiendo ese dinero. Si, por ejemplo, puedes ganar más invirtiendo en la bolsa que lo que pagas en intereses, no tiene sentido amortizar la hipoteca. Por otro lado, si tu dinero está parado en el banco sin generar beneficios, podría ser mejor utilizarlo para reducir tu deuda.
La influencia de la inflación
La inflación también juega un papel importante en esta decisión. Si la inflación sube más rápido que los intereses de tu hipoteca, estarás ganando poder adquisitivo. Esto se debe a que los precios y salarios suelen aumentar con la inflación, mientras que el monto de tu deuda se mantiene constante.
Conclusión
En resumen, elegir una hipoteca es una de las decisiones financieras más importantes que tomarás en tu vida. No solo debes considerar el tipo de interés, sino también el plazo de devolución, las comisiones y la posibilidad de invertir tu dinero en lugar de adelantar la amortización. Con el conocimiento adecuado y una buena planificación, puedes ahorrar dinero y tomar la mejor decisión para tus necesidades.